Carta pedagógica: Desarrollo de la atención en los niños

10 mayo, 2023

Acompañamiento del libro: Aventuras en el parque

Podemos definir la atención como la habilidad mental de generar y mantener un estado de interés, el cual permite procesar la información percibida por medio de los sentidos. Entre estos estímulos encontramos los siguientes:

Los estímulos internos (sensaciones físicas, procesos mentales, etc.)
Los estímulos externos (sonidos, imágenes, etc.)
La memoria
Los pensamientos
Las acciones motoras

Es común que los niños se distraigan, algo tan insignificante como un sonido puede distraer su atención. Esto se debe a que se encuentran en el proceso de aprender a concentrarse, no saben cómo ni para qué hacerlo hasta que lo descubren por medio de la práctica.

¿Cómo se desarrolla la atención?

Durante los primeros meses de vida (0-24 meses)

Poco a poco comienzan a generar interés en actividades, como pueden ser su hora de escuchar un cuento, de una canción o de jugar, aunque se distraen con mucha facilidad.

Etapa infantil (2 a 4 años)

Pueden mantener su atención por más tiempo y de manera voluntaria. Durante esta etapa también comienzan a desarrollar su concentración, aunque todavía se distraen con el mínimo estímulo externo.

Desde los 5 años

A partir de esta edad los niños desarrollan una concentración más estable, aprendiendo cuándo y cómo prestar atención. Empiezan a elegir aquello en lo que desean enfocarse si es que les resulta interesante o no.

Los niños tienen una capacidad promedio de atención de acuerdo a su edad. A partir de estas cifras puedes estructurar actividades de estimulación sin aburrirlo.

1 año – 3 a 5 minutos	6 años 12 a 30 minutos
2 años – 4 a 10 minutos	7 años 14 a 35 minutos
3 años – 6 a 15 minutos	8 años 16 a 40 minutos
4 años – 8 a 20 minutos	9 años 18 a 45 minutos
5 años – 10 a 25 minutos	10 años 20 a 50 minutos

Fuente: Caraballo, A. (s.f.). El tiempo de concentración de los niños según su edad

Consejos para estimular la atención

A través de juegos

Rompecabezas, adivinanzas, unir puntos, sopas de letras, laberintos, y una enorme variedad de juegos de mesa ayudan en el desarrollo de destrezas cognitivas como prestar atención y la formación del sentido de la lógica.

Con actividades interesantes

Actividades al aire libre como acampar, visitar un museo, ir al cine, a la feria, al zoológico, una reserva natural o un jardín botánico son actividades que incentivan el interés de los pequeños por la infinidad de estímulos que representan. Esto evita que los niños se aburran con facilidad, además de despertar su interés en diversas áreas.

Organicen sus tareas

Programando sus actividades diarias pueden contemplar espacios de descanso entre tareas, de esa forma pueden dedicar tiempo a las labores en momentos donde no cuenten con distracciones que retrasen sus actividades. Esto ayuda a enfocar sus esfuerzos para acabar una tarea y poder obtener tiempo libre.

Leer libros

Puedes ayudarle a desarrollar sus capacidades de concentración leyéndole en voz alta desde que es un bebé. De esta forma aprende a centrar su atención en un momento específico, mientras incentivas sus capacidades imaginativas.

Elegir libros acordes a su edad y sus gustos, así como caracterizar los diálogos son recomendaciones para mantener su atención en el momento de la lectura. Conforme tu hijo o hija crezca podrán ir cambiando las lecturas por títulos más complejos, sin ilustraciones y con más páginas.

La cualidad más importante que debes tener en cuenta como padre es la paciencia. Evita regañar a tu hijo/a cuando se le dificulte mantener la concentración o no demuestre interés en algo. Ayúdale a crear hábitos conforme a su edad, de esta forma aprenderá a enfocarse en sus tareas para obtener tiempo libre a cambio.

Si tu peque encuentra dificultades en el proceso, no lo presiones, busca ayuda profesional para determinar si es que tiene algún tipo de alteración en su atención, como puede ser el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).

Aplaude sus esfuerzos, compréndelo cuando falle y, lo más importante, prédica con el ejemplo. Cuando te cuenta algo, cuando juegan juntos, miran la TV o salen de paseo centra tu atención en el momento, puede que ambos aprendan algo en el proceso.